Artículo de Noelia Ibáñez, colaboradora de la Asociación de las Jornadas de Novela Histórica de Granada.
Nombrado Monumento Histórico Artístico en Diciembre de 1919, El Cuarto Real de Santo Domingo, también conocido como el Palacio de Almaxarra, abre sus puertas al público, quienes podrán disfrutar de la obra que dio inicio a la arquitectura nazarí.
El palacio de la Almaxarra está situado en una antigua zona de huertas, conocida como la huerta de la Almaxarra, se dividía en cinco zonas pertenecientes a familias aristócratas de importancia. Una de ellas, y en concreto la de mayor tamaño, pertenecía a la sultana Aixa, madre de Boabdil (1482-1492).
Su construcción, aunque discutida, se sitúa a finales del siglo XIII y se encontraba lindante con la muralla, dentro del arrabal de los Alfareros. Esto supone que el Palacio es el edificio de adornado árabe de Granada más antiguo. Es sin duda el edificio a quien la Alhambra debe su herencia. En ello, y en la reminiscencia de arte almohade, están sus características más importantes.
Todo parece indicar que servía a los reyes musulmanes para recogerse en él los días del Ramadán o cualquier actividad de descanso ocasional tal y como podemos deducir por el tamaño de las dependencias. Perteneció a las reinas moras a las cuales los Reyes Católicos se lo compraron. Posteriormente fue cedido al Convento de Santa Cruz y ya en el siglo XIX pasó a manos privadas. Fue entonces cuando la qubba quedó rodeada por nuevas edificaciones.
En el año 1990 el Ayuntamiento de Granada lo compró e inició su restauración.
De la edificación árabe queda una torre con más de 21 metros de altura, que hoy se encuentra dentro de un edificio moderno rodeado de jardines, donde antes hubo un pórtico con zócalo de azulejos y un estanque, ya desaparecidos.
Al hablar de torre-palacio nos referimos a una gran torre con un salón dentro del tipo denominado qubba (cúpula), lo que indicaba que era un espacio de planta cuadrada y proporción esbelta, cubierto por un techo no plano. El interior de la planta es casi cuadrado, con cerca de 7 metros de lado con arcos simétricos en los laterales y unas celosías de yeso con formas geométricas producto de época posterior. Se accede a ella a través de un arco peraltado con impostas de mocárabes. Sus albanegas exteriores son lisas, tan solo decoradas por una estrella de ocho puntas con epigrafía cúfica, mientras que las interiores están rellenas de ataurique. El arco se corona con una enorme ventana geminada abierta en el siglo XIX, un elemento que impide averiguar si tuvo primitivamente ventanitas con celosías en esa zona de muro.
La torre iría precedida en época nazarí de una alberca octogonal y una fuente a la que se daría paso tras el pórtico y estaría, a su vez, rodeada de jardines que quedaron enterrados al subir su nivel.
Adosada a la qubba encontramos una casa que ha sufrido a lo largo del siglo XX muy diversas reconstrucciones. Esta se construyó en el siglo XIII y es la vivienda árabe más antigua de Granada. Será conocida como la casa de los Girones por uno de sus antiguos propietarios.
Finalmente, tras dos años de laboriosa reconstrucción, El Cuarto Real de Santo Domingo ha sido habilitado para ser visitado y podremos disfrutar de uno de los monumentos más destacados de Granada mientras que las labores arqueológicas continúan dándonos más información sobre él.
Para más información sobre el monumento (horarios de visita, recreaciones, imágenes…etc.), son de interés las siguientes páginas: